martes, 24 de septiembre de 2013

toco tu boca

P. me toca la boca. Trata de abrirla. Mete el dedo y me toca los dientes, la lengua. Entonces muevo la lengua como loca y se mata de risa. También a la seño le toca la boca. Ella le muerde el dedo despacito. Se ha vuelto su rutina de todos los días.
A P. le gustan las barbas. Las de los tíos, la más incipiente del padre. Dedica un buen rato a escudriñar ese pelo que de manera caprichosa se decide a crecer en la cara de algunos.
Como los ciegos, que aprenden el mundo con la mano.
Como los enamorados, quizás, que se dedican a estudiar detalladamente el relieve del rostro amado.
El mundo es táctil para P.

No hay comentarios:

Publicar un comentario